La producción de petróleo, el área aprobada para construir y los despachos de cemento reportaron caídas, así como el transporte de pasajeros, el comercio de vehículos y las percepciones de crecimiento de las ventas. Por su parte, en Villavicencio decreció el abastecimiento de productos agrícolas y aumentaron la tasa de desempleo y la variación anual del IPC.
En contraste, la región avanzó en colocaciones del sistema financiero, producción de arroz, ocupación hotelera, créditos agropecuarios, importaciones totales y exportaciones sin incluir petróleo y sus derivados.
El boom petrolero pasó y sus consecuencias ya comenzaron a manifestarse de acuerdo con la más reciente entrega del Boletín Económico Regional, publicado por el Banco de la República, y que mide el desempeño económico de la Región Sur Oriente, es decir la Orinoquia con el departamento de Amazonas y sin Arauca.
El panorama económico no es halagüeño: Meta y Casanare, continuaron liderando la producción de crudo en el país con un aporte de 68,6%. No obstante, esta zona reportó una disminución anual de 11,1%, que contrastó con el ligero aumento del año anterior y representó el peor desempeño en más de cinco anualidades.
De manera particular, el Meta registró entre abril y junio una producción de 455.239 bpdc, al señalar una caída de 11,7% que interrumpió el avance mostrado en igual lapso de 2015.
El campo Rubiales tuvo una incidencia muy alta sobre este resultado por ser el de mayor participación en la producción departamental y evidenciar una reducción superior al 15%. Asimismo, se presentaron descensos, aunque de menor magnitud, en otros campos importantes como Quifa, Castilla Norte y Chichimene Suroeste.
En el rubro de área aprobada para construcción la región, cuya contribución al consolidado nacional no sobrepasó el 4%, contabilizó 226.452 metros cuadrados lo cual representó una contracción de 8,1%. Mientras que, en despachos de cemento, en Meta y Casanare hubo una caída interanual de 13,3% y ratificó la tendencia decreciente observada desde finales del año anterior, al totalizar 131.705 toneladas, las cuales significaron un monto inferior al 5% del consolidado nacional.
En Meta, Casanare, Guaviare, Amazonas y Vichada, fueron vendidos un total de 1.240 vehículos nuevos, una cantidad inferior en 22,6% y 34,0% a las reportadas en los mismos lapsos de 2015 y 2014, respectivamente. Lo anterior lo atribuyen los analistas del Banco de la República a la desaceleración económica local, la menor venta de automotores solicitados para la industria petrolera, negación de créditos a clientes que no se ajustaron a los estándares establecidos por los establecimientos financieros y el aumento en precios; sobre todo, de los automóviles importados, consecuencia de la devaluación del peso.
Entre abril y junio del año en curso, el total de pasajeros salidos desde la Terminal de Transportes de Villavicencio sumó 426.750, lo cual representó una disminución de 11,4% frente al registro de similar periodo del año anterior. En el lado del transporte aéreo, de acuerdo con estadísticas suministradas por la Aeronáutica Civil de Colombia, entre abril y junio de 2016 el flujo de pasajeros transportados en los principales terminales aéreos de la región totalizó 231.152 personas, lo cual significó una cantidad inferior 3,6% a la reportada durante el mismo periodo de 2015.
En lado de la captación financiera es en donde más se ve la desaceleración. De acuerdo con la información estadística de la Superintendencia Financiera de Colombia, las captaciones de recursos en la región Suroriente registraron al cierre del primer semestre del año en curso 6.82 billones de pesos, una reducción del 14,3% frente al corte del mismo lapso del año anterior.
Sin embargo, hay otros sectores que están dando la cara. Las exportaciones excluyendo petróleo y sus derivados mostraron en el acumulado a junio un incremento de 8,8%, al totalizar 1.18 millones de dólares. Los principales destinos de las exportaciones llaneras son Estados Unidos, Alemania y Ecuador.
