Una emergencia natural conmocionó a la comunidad de Aguazul, Casanare, luego de que una creciente súbita en la quebrada La Vegana arrastrara a tres integrantes de una misma familia en la tarde del jueves 21 de agosto.
Las víctimas fueron identificadas como Doris Rocío Quesada y su hija Liliana Esmeralda Gómez Quesada, quienes perdieron la vida tras ser arrastradas por la fuerza del afluente mientras se dirigían hacia su vivienda. Sus cuerpos fueron hallados alrededor de las 11:00 de la noche, a unos tres kilómetros del punto donde intentaban cruzar la quebrada.
La emergencia también afectó a la pequeña Estefany Samara Guerrero Gómez, de tan solo 2 años, nieta de Doris Rocío, quien continúa desaparecida pese a los intensos esfuerzos de búsqueda que superan ya las 30 horas.
El caso fue reportado a las autoridades hacia las 10:00 p. m., cuando vecinos notaron la ausencia de las mujeres en su vivienda. Desde primeras horas del sábado, se instaló un Puesto de Mando Unificado para coordinar las labores de rescate en la zona.
En el operativo participan 22 unidades del Cuerpo de Bomberos, que han desplegado drones, botes, equipos de buceo y vehículos de apoyo. A ellos se suman 10 voluntarios de la Defensa Civil, personal de la Secretaría de Gobierno municipal, Gestión del Riesgo departamental y aliados estratégicos como ingeniera STM y Ecopetrol, quienes aportaron recursos tecnológicos como drones adicionales para la inspección aérea.
La comunidad local y familiares también se han vinculado a la búsqueda, acompañando las labores en terreno con la esperanza de encontrar a la menor. Las autoridades han reiterado el llamado a extremar las precauciones durante la temporada de lluvias, especialmente en zonas ribereñas donde los afluentes presentan crecientes súbitas.

