Este viernes 1.º de agosto a las 2:00 de la tarde, el país estará atento a la lectura oficial de la sentencia contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez, quien fue declarado culpable en primera instancia por los delitos de fraude procesal y soborno en actuación penal. La jueza 44 penal de conocimiento de Bogotá, Sandra Liliana Heredia, determinó esta semana la responsabilidad del exmandatario en un caso que lleva más de una década en el sistema judicial.
Durante la audiencia, la jueza revelará cuántos años de privación de la libertad deberá cumplir Uribe, y si lo hará en una cárcel ordinaria o en prisión domiciliaria. La Fiscalía ha solicitado una pena de 108 meses, es decir, nueve años, al considerar que Uribe indujo falsos testimonios con el objetivo de desviar procesos en su contra.
Sin embargo, expertos señalan que el expresidente, de 73 años, podría recibir el beneficio de detención domiciliaria, teniendo en cuenta su edad y la ausencia de antecedentes penales. El Código Penal colombiano contempla esta posibilidad para personas mayores de 65 años que no representen un peligro para la sociedad.
La defensa de Uribe, liderada por el abogado Jaime Granados, ha anunciado que apelará la decisión ante el Tribunal Superior de Bogotá. De no resolverse antes del 8 de octubre de 2025, el caso podría prescribir, lo que implicaría el cierre definitivo del proceso.
Esta es la primera vez en la historia reciente de Colombia que un expresidente es condenado penalmente. El fallo ha generado reacciones dentro y fuera del país. Mientras sectores del Centro Democrático denuncian persecución política, el presidente Gustavo Petro ha defendido la independencia judicial y pidió garantías para la jueza Heredia.
A pesar del fallo, la sentencia no está en firme. El proceso podría continuar por años si se presentan recursos adicionales ante la Corte Suprema de Justicia.
