El presidente Gustavo Petro rechazó este domingo el paro armado nacional de 72 horas anunciado por el Ejército de Liberación Nacional (ELN), luego de que en varias regiones del país se registraran ataques violentos, cierres de vías y acciones intimidatorias desde el comienzo de la medida a las 6:00 a. m. Petro calificó la iniciativa como una amenaza contra la población civil y ordenó a la Fuerza Pública responder con fuerza para defender al pueblo colombiano.
El paro armado, que se extenderá hasta las 6:00 a. m. del miércoles 17 de diciembre, fue confirmado por el Frente de Guerra Urbano Nacional del ELN, que en un comunicado instó a suspender transporte, comercio y movilidad y advirtió a los habitantes de ciudades como Cúcuta, Barrancabermeja, Medellín, Bogotá, Cali y Popayán y sus áreas metropolitanas de evitar acercarse a unidades policiales y militares.
En Norte de Santander, uno de los episodios más graves ocurrió en la madrugada en el municipio fronterizo de Puerto Santander, donde un grupo armado del ELN atacó con ráfagas de fusil la estación de Policía. El enfrentamiento, que se prolongó por alrededor de 15 a 20 minutos, no dejó bajas entre los uniformados, pero un conductor de una ambulancia municipal murió como víctima civil al quedar atrapado en la acción armada.
Además, en el departamento se reportaron cierres preventivos de varias vías por la presencia de cilindros y paquetes sospechosos con insignias del ELN. Tramos de la carretera entre Cúcuta y Pamplona, así como otros puntos estratégicos, permanecieron cerrados mientras las autoridades inspeccionaban objetos que podrían ser artefactos explosivos y derribaban árboles colocados para bloquear el paso.
La preocupación también se extendió a otras zonas rurales y urbanas donde la guerrilla instaló advertencias y símbolos, lo que provocó clausuras temporales de tramos viales y activó consejos de seguridad en diferentes territorios. En Antioquia, la Gobernación activó un Consejo de Seguridad permanente y coordinado para responder a cualquier alteración del orden público y garantizar la movilidad de los ciudadanos pese a las amenazas de la guerrilla.
Las autoridades mantienen alerta en varios departamentos y municipios ante la posibilidad de nuevas acciones violentas del ELN durante las próximas 72 horas, y han reforzado la presencia de tropas y equipos especializados para despejar vías, neutralizar artefactos peligrosos y evitar mayores impactos a la población civil.
