Este primer lote de pruebas rápidas entran en un proceso de validación que tomará una semana, para asegurar su calidad.
Desde el pasado mes de marzo, el ministro de salud y protección social, Fernando RuÍz Gómez, anunció la autorización de su uso y el suministro de 1’049.000 pruebas rápidas por parte de los Laboratorios Abott, en esa ocasión se anunció la llegada de 350.000 pruebas semanales, a partir del 1 de abril.
Estas pruebas rápidas están diseñadas para ser aplicadas en los consultorios y clínicas de todo el país. Agilizando el proceso de diagnóstico y permitiendo a los profesionales de salud tomar decisiones en cuanto aislamiento, realización de prueba diagnóstica confirmatoria y tratamiento.
Las pruebas rápidas indican una posible infección reciente o en curso, pero son mucho más precisas descartando casos negativos. En caso de que la detección de anticuerpos resulte positiva, se debe realizar la confirmatoria con RT-PCR.
