Empresas trasportadoras usuarias del terminal de transportes de Paz de Ariporo, decidieron operar desde la calle y no desde la plataforma de abordaje; la razón: el estado de la plataforma, está llena de huecos y cada vez que llueve, los charcos hacen intransitable la zona, sometiendo los vehículos a tratos que les generan deterioro prematuro.
Con las lluvias de las últimas horas la situación se complicó, lo que llevó a las empresas a tomar la decisión de realizar la acción de cargue y descargue de pasajeros en plena vía pública lo que podría significar un riesgo a los pasajeros que podrían exponerse a situaciones imprevistas afectando su integridad física. Para los representantes de las empresas, quien debe responder por la administración del terminal es secretaría de gobierno y quien recauda es la secretaría de hacienda municipal o tesorería. Según sus cuentas, una buseta paga por cada vez que ingrese al terminal, la suma de 2.300 pesos mientras que un bus paga 3.300 pesos. Argumentan que por hora se usa el terminal por busetas entre quince y veinte veces, lo que daría una suma, tomando como base quince ingresos, 34.500 pesos por hora. El cobro se recauda entre las 4:00 de la mañana y las 6:00 de la tarde, lo que significa que se estarían recaudando 14 horas por día, Al hacer la multiplicación, el resultado es 483.000 pesos recaudados diariamente, si fuera constante, multiplicando por 30 que son los días del mes, el resultado sería 14’490.000 pesos y se multiplica por 12 que son los meses del año, la suma sería de 173´880.000 pesos.
Las empresas usuarias del terminal dicen que cuando solicitan a la administración el apoyo, la respuesta es que no hay plata y que hay maquinaria disponible, pero no hay combustible y les sugieren que desde el terminal se aporte el combustible necesario para intervenir con motoniveladora la plataforma y solucionar temporalmente el problema denunciado.
Por otro lado, se encuentran los comerciantes que tienen sus casetas al interior de la plataforma de abordaje, ellos dicen que se les quedan los productos porque quienes compra son los viajeros que vienen de Arauca y solo hacen tránsito por el terminal. La preocupación de los viajeros radica en que al estar en la vía se ven expuestos y podrían resultar involucrados en un accidente.
Al consultar con el secretario de Gobierno del municipio, Arles Benites, manifiesta que esa administración corresponde a Gobierno y tesorería, pero las cuentas que manejan ellos distan de las que proponen las empresas usuarias en el terminal y agrega que, en el mejor de los casos, esas cifras corresponderían a un día importante festivo como un 6 de enero. Argumenta que sí hay vigilante, pero este se encarga de los turnos nocturnos y que el aseo corresponde a cada uno entre quienes se sirven del terminal.
Dice que intervenir en época de lluvias no traería los resultados esperados porque al regar material se convierte en un problema peor ya que la humedad no permite compactar el material creando un barrizal en plena plataforma. Sin embargo, advierte que hay quince viajes listos para ese mantenimiento y que cada viaje cuesta más de 600 mil pesos, que según su opinión, se perderían de «regarlos» ahora.
Entre las cuentas que maneja la tesorería municipal, están recaudos diarios de entre $150.000 y $160.000.

