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Pelea de David y Goliat en la Bendición en Yopal

Elsa Parra, residente en un lote de la Ciudadela La Bendición, afirma que Jhon Jairo Torres Torres, la ha venido intimidando y que el viernes ordenó a varios trabajadores desalojarla de su rancho. Él desmiente acusaciones y considera que ella es una invasora.

De acuerdo con la versión de la mujer, que tiene dos hijos y dice estar embarazada, entre septiembre y octubre pagó tres millones de pesos por el terreno en las oficinas de la Ciudadela La Bendición y en diciembre se pasó a vivir en el rancho que construyó con láminas de zinc.

Doña Elsa narra que posteriormente Jhon Jairo Torres, la visitó para indagarle sobre el predio, preguntándole que quién le había vendido el lote, frente a lo cual ella le dijo que lo había pagado en las oficinas de la Ciudadela a las señoras Patricia Riveros y Genni Milady Torres, su hermana.

Igualmente expresó que en otra oportunidad  él vuelve a aparecer y le manifiesta que ese lote no estaba autorizado para la venta y que los recursos que ella dice haber pagado no ingresaron a la contabilidad de la Ciudadela, por tanto debía desalojar y que le daba unos días para hacerlo o enviaría a personas a sacarla a ella y su familia.

Entre tanto acordaron que ella debía poner una demanda por estafa contra la señora Patricia Riveros, la cual fue redactada por abogados de la Ciudadela, pero cuando fue a la Fiscalía ella incluyó en la demanda a Genni Milady Torres, porque ella fue una de las personas que recibió el dinero.

Desde este momento su vida se complicó más porque aumentaron las intimidaciones e intentos de desalojarla. El viernes 22 de mayo hacia las dos de la tarde una persona la llamó cuando estaba trabajando y le dijo que obreros le estaban tumbando el rancho. Inmediatamente acudió junto con su esposo al sitio y encontró que con una retroexcavadora le había tirado la puerta, parte del piso interior y el andén, llamó a la policía, la cual acudió y se logró detener a los trabajadores, que dijeron estar al servicio de Jhon Jairo Torres.

La mujer narra que el capitán de la policía luego de hablar por celular con Torres Torres le manifiesta que era mejor conciliar y llegar a un acuerdo para subsanar lo dañado. Doña Elsa acepta y dice que está de acuerdo pero que ella acudirá a la Fiscalía a denunciarlo por daño en bien ajeno.

Luego de varios días de sucedido el hecho aún no se ha arreglado lo destruido y ella ya no sabe qué hacer; Niega que sea una invasora y dice que no ha podido pagar las cuotas porque Jhon Jairo Torres dijo que ese lote no estaba en venta y no le recibe el dinero.

Mientras tanto Jhon Jairo Torres expresa que la señora es una invasora porque no le pagó el lote a la Ciudadela La Bendición y desconoce los pagos que ella dice haber realizado al considerar que o bien pudo ser estafada por la señora Patricia Riveros, quien fuera empleada de la Ciudadela o actúo en complicidad con ella para lo que él denominó “hacer un torcido”.

Con respecto a la situación registrada el viernes dice que no fue un desalojo pero no precisó de qué se trataba la diligencia que hacían sus trabajadores en el lugar.

Frente a las presuntas amenazas e intimidaciones dice que es falso y que lo que sí tiene claro es que no va a permitir a ningún invasor en los predios que él compró y que ha venido vendiendo a miles de ciudadanos.

Jhon Jairo Torres afirmó que ya había puesto las denuncias respectivas pero no indicó que instancia judicial porque de eso se encargaban los abogados de la Ciudadela.

Igualmente afirmó que cree que la señora es mandadera de algún político que quiere dañarle su imagen ahora que está aspirando a ser candidato a la Alcaldía de Yopal.

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